Considero que en todas las ocasiones que explicamos algo tenemos una justificación y es así como también para las acciones y situaciones simples o complejas que nos entrega la vida, desde el sabor de un helado hasta la casa en la que queremos vivir, y cuando es relacionado a algún sentimiento los motivos existen pero es aquí cuando se nos complica la explicación porque muchas veces puede herir al otro y en la mayoría de las ocasiones para que no pase eso se miente, se agradece porque existe una preocupación pero también depende de la mentira podría ser más perjudicial . Me ha pasado  también que derrepente tengo ganas de llorar, siento mi pecho apretado como que me ahogara, lloro un rato y no consigo entender el porque de mi llanto, pero en el fondo de mi corazón se siente una presión emocional en donde he visto algo que me trae recuerdos tristes y se queda ese sentimiento ahí y por la noche se desata en lagrimas y aparte por lo sensible de algunos días que por lo general vivo yo ;). Uno no puede mentirse a si mismo, debe reconocer que tiene claro el motivo de tus decisiones y más aun frente a las personas, pero eso es lo difícil y lo que muchas personas no hacen, reservarse la opinión y el motivo eso sí se puede hacer, incluso a mi me cuesta a esta edad, pero tenemos que considerar que si hay un motivo de porque mentimos, es gracioso y sorprendente a la vez puesto que nada hacemos a la ligera, que otros suelten la información sin pensar en el otro, en ese caso también hay motivos pero un poco más egoístas. En realidad estamos atrapados en la red de las decisiones que  tienen sus motivos y que nos reservamos o exponemos a voluntad, el que entiende lo que escribí ampliara un poco la mente ;)

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