Aveces pienso en miles de cosas que quiero y siento, por ejemplo quiero casarme, siento la necesidad de estar acompañada. Pero cuando es momento de responder estas preguntas o dichos, suelo tener pena porque mis respuestas no son nada favorables. sé que no soy la única que sufre por estos dichos y realmente me duele más por el que por mí, porque ya llevo tantos años en la misma que para mi ya es como respirar algo muy normal, pero el por culpa mía empezó a pensar y sentir como yo y a manifestar su tristeza y me duele no darle el consuelo que merece, la respuesta correcta, solo se puede decir que somos adultos y que Dios sabe por que haces las cosas de esta manera, ambos sufrimos por estar lejos el uno del otro, por no lograr los sueños que compartimos, por que los años avanzan y  no crecemos como el mundo quiere con un matrimonio hijos, un hogar constituido, solo nos conformamos con la compañía momentánea, temporal que vivimos, porque nos desgarra separarnos, solo tenemos que aceptarlo, hasta que Dios permita otra cosa, Sé que  Dios pone pruebas difíciles a quienes son sus hijos y creen en el para mejorarnos, solo le pido que me de la fuerza para superar todas las pruebas que envíe y así dejar esta pena que tengo en mi corazón

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